Entre hongos y menhires, un grupo de irreductibles “savi@s” hemos podido disfrutar nuevamente una vez más de la hospitalidad de Alfredo Cunhal y todas las familias que componen Freixo do Meio.
Fuimos agraciados con el encargo de colocar tres composiciones de azulejos para dar nombre a tres lugares de Freixo, reconociendo a tres personas, con cuya acción demuestra la persona que es, su antiguo encargado en la finca, un pensador, Agostinho da Silva y su madre, Ana María Cunhal. los cuales han sido descubiertos. Antonio Abel, con lágrimas en los ojos ha mostrado su más sincero agradecimiento y respeto a Alfredo y su familia.
En la Herdade los detalles son fundamentales, tanto que incluso se han dado ceniceros individuales hechos de caña con tapones de corcho reciclado.
Hoy se han servido más de 400 comidas para parte de las personas que han venido, se ha realizado un mercado de productos ecológico, de cercanía y artesanos, ha habido un cine Forum de temática ambiental. Pero este proyecto no para ahí. Se ha recuperado y reconstruido un poblado neolítico dentro de la finca, donde se puede comprobar de primera mano cómo vivían los primeros pobladores de Alentejo.
Se ha marcado como objetivo plantar 50.000 árboles para este año para implementar la agroforestal en toda la finca. Están en proceso deconstrucción dos nuevos edificios autosuficientes a través de las placas solares y la utilización de biomasa en las calderas y hornos.
Freixo es un ente vivo en producción ecológica en constante evolución y parte de él con la humildad que le caracteriza es Alfredo y bien sabido que ya somos muchas personas y entidades las que sentimos como algo nuestro este reducto de biodiversidad en el centro de Portugal.
Agradecer la hospitalidad y el cariño que siempre recibimos.